Comenzar la temporada con dos victorias consecutivas no es para nada fácil y mucho menos aún, cuando el equipo no está conformado con nombres importante ni mucho menos.
El Diario del Centro del País
Ese es Hipólito Yrigoyen, que se basa en el esfuerzo y el juego de todo un equipo lleno de humildad y que se alzó con otra gran victoria en condición de visitante, tras derrotar por 1 a 0 a Unión Central, mandando en la Zona B de la Liga Villamariense de Fútbol.
La diferencia fue mínima, pero con eso les alcanzó a los dirigidos por Marcelo Sachetto para derrotar a un “Aurinegro” tímido en los últimos metros, hasta con un hombre de más.
Porque a pesar de la localía, el conjunto villamariense nunca le encontró la vuelta al partido y no logró quebrar la resistencia del equipo de Tío Pujio.
Tempranero, así fue el golpe del visitante en la “Leonera”. Porque a los 8’ Federico Novillo recibió el balón dentro del área y Ezequiel Gaido lo derribó. Diego Gallo marcó penal y el volante Andrés Ferrero lo cambió por gol. Miguel Ambrosio alcanzó a tocar la pelota, pero no fue suficiente como para detenerla y evitar el 1 a 0 del “Diablo”.
Con esa diferencia se desarrolló todo el cotejo. Hipólito Yrigoyen le cedió el protagonismo al local, pero éste no supo qué hacer con el mismo. A pesar de que las pinceladas de Martín Delfino estaban presentes y que el conductor se asociaba con Oscar Pérez, entre otros, a Unión le costaba mucho.
Solo en la primera etapa, el de calle Rucci tuvo un tiro de esquina de Fernando Cabrera, que casi se mete olímpico, más un cara a cara de Kevin Cech, que el centro-delantero desperdició por demorar en la definición.
El visitante también contó con pocas en el área rival y sería nuevamente Ferrero el protagonista, pero, esta vez, la definición del volante salió desviada.
El complemento mostró la expulsión de Alejandro Fonseca en Yrigoyen, apenas iniciado el complemento (12’). Eso alentó aun más a los dirigidos por Jorge Negrette para buscar el empate.
El local pasó a defender con tres porque sumó un delantero más en ofensiva; Cech, mas los ingresados Platini y Sánchez, era la apuesta del local para llenarse la boca de gol, pero, a decir verdad, Yrigoyen se las arregló muy bien para defenderse y pasar desapercibido el hombre de menos.
Es más, tuvo un par como para liquidar. Primero, con Ferrero nuevamente pisando el área rival, quemándole las manos a Ambrosio, y luego desde el banco de suplentes lo perdió Ignacio Cardozo para la visita.
Claro que el momento de Unión Central llegaría sobre el final, cuando se la jugó a “matar o morir”. Allí lo tuvo Sánchez, pero tapó brillantemente Oliva y luego despejó en la línea el capitán Peralta, cuando ya estaba batido el uno y todos gritaban el empate.
Finalmente, fue triunfo de Yrigoyen, que festejó en rodeo ajeno, cuenta sus partidos por victorias y se ilusiona de la mano de los pibes.
La figura
El árbitro
La figura
Ezquiel Oliva. Estuvo seguro a lo largo de los 90 minutos. El juvenil portero se mostró firme de arriba y a la hora de tapar pelotas de gol. Estuvo muy bien secundado por sus centrales Peralta y Frugnoletti. Se destacó, también en la visita, Andrés Ferrero, con gol de penal y mucho despliegue físico.
El árbitro
Diego Gallo. Buen arbitraje del referí local. Correcto en el penal de Ezequiel Gaido sobre Federico Novillo y acertado en la roja de Alejandro Fonseca. No tuvo inconvenientes en el desarrollo del partido.