Los primeros minutos mostraron un juego muy equilibrado y con buenas intenciones por parte de ambos planteles, tanto locales como visitantes estaban presentando mucho ímpetu y entrega deportiva, sin embargo era Calle Ancha quien estaba algo más cerca de la conversión proyectándose desde los costados, buscando la penetración y volcando centros intentando quebrar la defensa rival.

Campito de igual manera resultaba peligroso en sus ataques, ganaba el esférico en su campo saliendo muy rápidamente, realizando entregas cortas y seguras, llegando hasta la última línea contraria buscando la apertura del marcador y hacia los 12 minutos un remate colonense concluye estrellándose contra el poste superior de Gastón Wilvers, guardameta de Calla Ancha.

El encuentro continuó siendo muy apasionante y entretenido, ambos equipos estaban jugando muy bien, mostrando buen fútbol, ideas claras al momento de trabajar el esférico y llegando a las últimas líneas siendo muy peligrosos en sus ataques, obligando a los arqueros a esforzarse en ciertos momentos para evitar las caídas de sus respectivas vallas.

Paulatinamente se fue bajando de intensidad, ya no se manifestaba tanto vértigo y velocidad, se estaba comenzando a marcar mucho y algo fuerte, lo que derivaba en que se entrecorte bastante el juego a causa de las faltas reiteradas.

El resultado momentáneo era justo, tanto locales como visitantes jugaron bien los primeros minutos, mostrando buen fútbol, trabajando el balón con ideas claras y entregas seguras, llegando al fondo y generando situaciones de peligro, pero sin lograr el desequilibrio que permita llegar a la conversión, bajando luego su nivel futbolístico, lo que generó que el juego decaiga y se torne por momentos tedioso y cortado por la reiteración de las faltas.

Desde el comienzo del complemento Campito había salido decidido a obtener la apertura del marcador, había crecido en el campo de juego tras el retraso de las líneas rivales y obtendría el gol a través de Juan Pablo Silva quien a los 6 minutos envía el balón al fondo de las mallas de Gastón Wilvers.

Los de la colonia parecieron reaccionar y se volcaron al ataque con mucha velocidad, valentía y vértigo intentando igualar las situaciones pero encontrándose con un fondo contrario muy sólido que ganaba el esférico y salía de contragolpe muy rápidamente buscando la sorpresa.

Campito estaba haciendo muy buen trabajo y lo comenzaría a plasmar en el tanteador, hacia los 19 minutos un ataque iniciado en Cartosio quien juega para Muzzeti que envía el centro y Folgueiras, presionado por Firpo, concluye enviando el balón al fondo de su propia valla.

Cuando se jugaban 22 minutos una fuerte falta de parte de Carlos Fernández sobre un contrario, logra que Méndez, árbitro del encuentro, le muestre el cartón rojo de manera directa, dejando a Calle Ancha con 10 hombres.

Los de la colonia estaban poniendo mucha vergüenza deportiva y comenzaban a atacar la valla contraria y sería en uno de esos tantos embates que llegaría el descuento a través de un tiro libre penal, tras una mano de un defensor colonense dentro del área, que debió ser ejecutado tres veces por Mauricio Núñez a los 32 minutos, al cometerse invasión al momento del remate las dos situaciones anteriores en las cuales la primera fue conversión y la segunda fue desviada por Pablo Argüello.

Ahora los de Ríos estaban inclinando la cancha su favor, iban, atacaban y buscaban la igualdad a como dé lugar, buscando por todas las posibilidades, hostigando una y otra vez la última línea rival, volcando muchos centros intentando la penetración y exigiendo al guardameta colonense en algunas situaciones para evitar la caída de su valla.

Sobre el final del encuentro se vieron algunos incidentes por parte de los jugadores de Calle Ancha tras la anulación de un gol por parte de Méndez al entender que al momento de recibir el balón el delantero que concluiría dentro de la valla contraria, se cometía aparentemente una falta sobre un defensor colonense.

Campito ganó bien y es un digno campeón, más que nada por lo realizado en el complemento, fue superior a su rival, lo demostró en el campo de juego y lo plasmó en el tanteador, poseyó buen fútbol, manejó claramente el esférico y consiguió las conversiones en los momentos justos, sabiendo luego defender ese resultado. Calle Ancha retrasó demasiado sus líneas al comienzo de la segunda etapa y pagó cara esa decisión, luego reaccionó y se volcó al ataque pero no logró el desequilibrio necesario para llegar a la igualdad, en parte por la buena actuación de la defensa contraria y de su guardameta, Pablo Argüello, y en parte por imprecisiones propias de sus delanteros al momento de definir.

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